¡Oid bien! Me robó el corazón,
con una palabra, una mirada.
¡Levántate Aquilón, ven Autro!
¡Soplad y mi jardín se llenará de
aromas!
¡Estoy enamorada ¡ ¡Dioses del
Olimpo, venid! ¡Vedme, qué fácil
me ha vencido el amor!
¡Búrlense de mí, sea el hazmerreír
del pueblo, la mofa de mis enemigos!,.
Estoy absurdamente prisionera entre
las redes de un astuto pescador.
¿Librarme? ¡No quiero! Prefiero ser
su esclava a perder su amor.
¿Para qué quiero la libertad si me
condena la soledad?
¡Mirad! ¡¡Vedme derrotada, perdida
por amor!
Mi corazón no es mío, me lo robó,
corro tras de él, para verlo de cerca,
acariciarlo, besarlo…¿Para qué quiero
que me lo devuelva, si con el pierdo
su amor?
¡Perdonadme los que me juzguen, es
mía toda la culpa, yo me lo dejé robar!
¡Fueron tan dulces sus palabras!¡
Sus labios destilan miel y yo los bebí
con tanto placer!
¡Vedme aquí, de frente al mundo,
desafiándole, defendiendo mi derecho
al amor!
¡Apedreadme! ¡Matadme! Pero no me
priven de su amor!
Santiago de Cuba
9 de enero de 2007
19 mayo 2009
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