24 mayo 2014

ESCRIBIR

Me  pasaré la vida escribiendo, aunque

Nadie se digne leerme.

Mientras exista papel y lápiz escribiré,

Entre borrones y correcciones iré dejando

segmentos de mi vida.

Soy como un río que se niega   aceptar un

Muro que lo contenga.

Debo seguir entre piedras  y escollos siempre

Hacía un rumbo definido, otrora apacible, otro

Impetuoso, inclemente, devastador.

Soy como una fuente serena que invita  a ver

La imagen del que viene en son de paz,

Con ira destructora ante las injusticias, la  mentira

Y la falsedad.

Con mi verbo y mi pluma los combatiré por

Poderoso que se crea el enemigo. Siempre  los

Combatiré.

Mi razón de ser es  invariablemente es estar

Apegada a la verdad y a la libertad que me

Impone mi conciencia.

Escribiré, escribiré, hasta el fin de mis días

Lo que pasa por mi mente y me dicta el corazón.



Santiago de Cuba, 27 de  febrero de 2005

IMAGEN DE MÍ

Soy esa que tal nadie reconozca.

Esa que transita por la vida desafiándola

A cada paso.

Esa que la adversidad ha querido derrotar

Sin piedad.

Esa que ha vencido por ser más fuerte que

Ella y nunca haberle temido.

Esa que unos juzgan a su manera, pero que

En su propio juicio se condena o se absuelve,

Esa que da  amor sin límites ni medida, sin

Importarle la ingratitud n  de los demás.

Esa soy yo, buena, mala, regular ¡Qué se yo!

Pero esa  soy yo y no otra.


Santiago de Cuba, 27 de febrero de 2005


ANÁLISIS

A  veces siento envidia de los estúpidos, porque ellos no tienen poder de analizar, ni le dan importancia al futuro ni lo que tienen a su alrededor, apenas saben lo que es el verdadero sufrimiento. Viven por vivir y poco les importa qué dirán, la gente los mira a veces  con desprecio, otras con compasión, a ellos lo mismo les  da.

No son  esclavos de la moda, como la mayoría suele ser, Algunos son el hazmerreír de indolentes y faltos de  humanidad. ¿Qué se le exige a un ser así? – Nada que por su poca capacidad pueda realizar.

Viven un presente escaso y un futuro incierto dependientes de los demás a quienes  la vida les ha dado alguien por qué luchar y cuidar, sin ninguna esperanza. Ni ellos ni los restantes esperan nada, no tienen sueños a realizar y cada día es como  lo fue ayer y será mañana.

Reflexiono:- Doy gracias  a Dios por no ser así, ni tener ningún ser querido en esa situación, ni los envidio ni los desprecio, solo me inspiran un sentimiento de amor y protección.

Santiago de Cuba, 9 de marzo de 2007