26 septiembre 2009

BAJO EL PESO DE LA CRUZ

Por cada pecado que cometas, estás

Crucificando a Cristo.

Si la maldad se anida en tu corazón,

Clavos en su carne martilleas sin Piedad.

Si tu lengua maldice, calumnia y

vitupera a los demás, hiel y vinagre

Harás beber al que en la cruz padeciendo está.

Si hieres a tu hermano, lanzas estarás

Clavando en el costado del mártir del

Gólgota.

Si el egoísmo, orgullo y vanidad no

Te dejan ver la miseria y la pobreza de

Los demás, estarás coronando de espinas

La frente de Cristo.

Si no escuchas la voz del que te llama a

Redención, estarás dando la espalda al que

Su preciosa vida ofrendó por ti.

Si en la dureza de tu corazón no cabe esta

Verdad, no tendrás el gozo de ver a un Cristo

Resucitado, que vive, ama y perdona y con su

Sangre tus pecados limpió, para que creyendo

En él, puedas ser llamado hijo de Dios.


Iglesia “San Juan”
Santiago de Cuba,
3 de mayo de 2003

No hay comentarios:

Publicar un comentario