27 noviembre 2020

TESTIMONIO

He tenido muchas Biblias desde que En abril de 1960 me dirigí a la 1ra. Iglesia Bautista de Santiago de Cuba en busca de una  con el propósito de enviársela a mi novio José Cervera Cuquet, que había sido condenado a 20 años de prisión en el llamado Presidio Modelo de Isla de Pinos por mostrarse desafecto al régimen implantado el 1 de enero de 1959.

Allí la adquirí y quedé  consolada ante mi gran tribulación e invitada a asistir a los cultos. Así lo hice y  también compré otra Biblia para mí.

Después de esa etapa han pasado por mis manos muchas Biblias, las he regalado  a personas necesitadas de La palabra de Dios.  Así me quedé con una vieja y rota. Un joven vino  a mi angustiado  por los golpes que le daba la vida, sin vacilar se la entregué y me quedé sin Biblia, justamente al día siguiente recibí una nueva de la  Iglesia de Cristo de Matanzas.

Un domingo meditaba y miraba mi reloj de pulsera de 15 años  viejo y desteñido  y pensé:- Cuando tenga dinero me compraré otro. Para mi sorpresa al día siguiente recibo una visita de Estados Unidos y nos traía a mi hermano ya mí dos  relojes de pulsera, regalo de nuestro amigo y compañero de lucha Geordanis  Prieto.

Así sucesivamente cada vez que doy algo, recibo mucho más. ¿No es esa una bendición de Dios?


Madrid, 6 de agosto de 2020

No hay comentarios:

Publicar un comentario